Elon Musk intensifica su conflicto con las autoridades brasileñas

Elon Musk está redoblando su disputa con las autoridades de Brasil. Durante semanas, el multimillonario se ha negado a cumplir con las órdenes judiciales brasileñas de suspender ciertas cuentas en su red social, X. Ignoró las multas y luego despidió a los empleados de X en Brasil para que los tribunales no pudieran exigirles responsabilidades. Posteriormente, después de que la Corte Suprema de Brasil ordenara el bloqueo de X en el país, sugirió a los brasileños que utilizaran programas informáticos para eludir la prohibición, a pesar del riesgo de grandes multas que un juez ha amenazado con imponer por hacerlo.
Ahora, Musk vuelve a desafiar al gobierno brasileño. Starlink —el servicio de internet por satélite controlado por Musk, que cuenta con 250.000 clientes en Brasil— comunicó el domingo a la agencia de telecomunicaciones del país que no acataría las órdenes de bloquear X, según dijo el presidente de la agencia.
La réplica intensificó aún más una disputa que ya ha tenido consecuencias para millones de brasileños y para el negocio de Musk, insinuando que Musk no está dispuesto a dar marcha atrás a corto plazo. Este movimiento también ilustra el enorme poder de Musk y su imperio empresarial. Tras construir o comprar empresas líderes con un control cada vez mayor sobre la forma en que las personas se conectan y comunican, Musk está tratando de aprovechar esa influencia para enfrentarse a las autoridades y desafiar las leyes que no le gustan.
Ni Musk, ni X, ni  SpaceX —la empresa controlada por Musk que gestiona Starlink— respondieron a las solicitudes de comentarios. (Sigorta Haber)